El valor y el respeto a la vida

El valor y el respeto a la vida

EDUCACION PARA LA VIDA EN FAMILIA

Esta es la lección 888 del diplomado en educación para la vida en familia y el tema es, El valor y el respeto a la vida.

La afirmación «la vida es sagrada y valiosa» se encuentra desde la antigüedad en todos los mandamientos religiosos y jurídicos.  El mandamiento es no matar y el que matara era sancionado en muchos casos con la muerte.

Se establecieron excepciones y apoyados en la sandez humana se han cometido, se siguen cometiendo, miles de asesinatos hasta el punto de que podemos entender que la historia del mundo es la historia de la guerra y de la muerte. 

Hoy vivimos guerras en la mayoría de los países y hemos tenido guerras mundiales unas declaradas y otras ocultas y estamos bajo el peligro de una guerra que puede ser la extinción de la humanidad la que se sumaria a las agresiones que ejercemos a diario sobre el equilibrio ecológico, sobre el equilibrio del clima y de la vida integral.

Las noticias que en algunos casos llaman la atención se refieren a genocidios y masacres.  En otros a asesinatos de personas importantes. Los asesinatos de personas del común se pasan con indiferencia.

Las noticias dan cuenta de guerras, conflictos que generan muertes en

Ucrania,  Gaza, Sudán, Siria, Yemen, República Democrática del Congo, Haití,  Afganistán, Myanmar, México.

A esta lista hay que agregar la lista de los países que ofrecen peligro, que son inseguros, que infunden miedo, pánico como Venezuela, Rusia, Líbano y en algunos países regiones o sectores invivibles y en este rango tenemos que sumar a Colombia.

Es verdad que el mundo se recrea con muertes que son genocidios como las de Gaza y Ucrania y nos aterra que haya gobiernos que patrocinen esas destrucciones de vidas y de pueblos.

En Colombia tenemos cerca de 40 asesinatos por día y las victimas son niños, niñas, lideres sociales, mujeres que deciden ejercer su derecho a vivir sin obedecer a quienes con ironía llaman parejas sentimentales, personas que las identifican como enemigas por militancias ilegales, inocentes que son asesinados para robarles un celular y hasta sus modestos elementos de trabajo. A lo anterior debemos agregar los cientos de casos de violencia física, mental, sexual, laboral.

Y este paisaje de terror y angustia se oculta con verbenas populares, fútbol, discursos a manteles, estadísticas, promesas de cambio para que no haya “ni uno más” y hasta llamados para “negociar la paz”.

Los habitantes de Colombia necesitamos minimizar la aterradora situación de violencia, de inseguridad, de angustia ante la persecución de la muerte.

Su amigo, abogado  y profesor,

Carlos Fradique-Méndez

cfmconsultas@gmail.com