LOS PADRES ESCOGEN LA EDUCACIÓN PARA SUS HIJOS(AS), NO LOS COLECTIVOS.

LOS PADRES ESCOGEN LA EDUCACIÓN PARA SUS HIJOS(AS), NO LOS COLECTIVOS.

DIPLOMADO EN EDUCACIÓN PARA LA VIDA EN FAMILIA (391)
Carlos Fradique-Méndez
Abogado de Familia y para la Familia

Esta es una clase de educación para la vida en familia y me refiero a la obligación que tienen los progenitores de criar y educar a sus hijos e hijas.

LOS PADRES ESCOGEN LA EDUCACIÓN PARA SUS HIJOS(AS), NO LOS COLECTIVOS.

En las redes sociales se han divulgado videos, mensajes, en los que niños y niñas son obligados a gritar arengas con evidente contenido político, con tendencias fanáticas religiosas, con adoctrinamiento frente a cuestiones de género (x) o de sexualidad. Estos adoctrinamientos están prohibidos y hacen grave daño en la salud mental y social de nuestros infantes y hasta en nuestros adolescentes.

Escuché a un vocero de un gremio de educación y defiende esos videos con el argumento de que se trata de clases de civismo y de ciencias sociales. No es válida esa defensa porque los colectivos han tomado parte política a favor de un candidato y no pueden utilizar a los estudiantes, que son esponjas como ellos dicen, para llegar a los padres de familia y adoctrinar. Es delito de lesa humanidad dañar la mente y el futuro de los niños y niñas, quienes deben crecer en ambientes sanos, descontaminados, sin resentimientos, sin fanatismos, como lo ordena la Constitución. Veamos solo algunos mandatos de la Constitución:

– Son fines esenciales del Estado… asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo.

-Las autoridades de la República están instituidas para proteger a todas las personas residentes en Colombia, en su vida, honra y creencias.

– La honra, la dignidad y la intimidad de la familia son inviolables.

– Cualquier forma de violencia en la familia se considera destructiva de su armonía y unidad.

– La pareja, (los progenitores) tiene el deber de sostener y educar a sus hijos.

– Son derechos fundamentales de los niños la educación y la cultura, la recreación y la libre expresión de su opinión.

– La educación formará al colombiano en el respeto a los derechos humanos, a la paz y a la democracia.

– El Estado, la sociedad y la familia son responsables de la educación de niños y niñas.

– Los padres de familia tendrán derecho y obligación de escoger el tipo de educación para sus hijos menores.

– Los integrantes de los grupos étnicos tendrán derecho a una formación que respete y desarrolle su identidad cultural.

Creo que estas normas constitucionales son base suficiente para afirmar sin dudas, que son LOS PADRES quienes ESCOGEN LA EDUCACIÓN PARA SUS HIJOS(AS) Y NO LOS COLECTIVOS quienes pueden imponer sus criterios. Agreguemos que tampoco tienen ese derecho las confesiones religiosas, ni quienes defienden opciones sexuales o de consumo de sustancias prohibidas, ni los que tienen influencia en los medios para inyectar culturas denigrantes sobre modas, música, desprecio por la estima del ser humano.

Lo dejo a su sana consideración y será grato recibir sus observaciones.

SIGAMOS CULTIVANDO LA PAZ EN LA FAMILIA

Sigamos cultivando el respeto, las palabras decentes, la autoestima, el civismo, en nuestra familia, en nuestra sociedad y en Colombia para para tener vida digna y sana convivencia.
Bogotá, del 13 al 19 de junio de 2022

Envíe sus comentarios a carlosfradiquem@outlook.com y
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P.D. El 19 de junio debemos elegir Presidente de Colombia. Una obligación ciudadana es participar en el proceso electoral y tenemos dos opciones elegidas por quienes votaron, por quienes no votaron y por quienes votaron en blanco. Uno de los dos será presidente y ahora TODOS, TODOS, o TODAS Y TODOS COMO DICEN EN EL NUEVO LENGUAJE, debemos seleccionar el mejor y si consideran que ambos tienen falencias, pues deben optar por el menos malo, por el que se crea que pondrá en menos riesgo el futuro de Colombia. El deber es pensar en el futuro de nosotros, de nuestra familia, de nuestra sociedad, de nuestra Colombia. No juguemos el futuro de Colombia a los dados, sobre túnicas manchadas de todo lo que queremos que no vuelva a suceder.