RECORDEMOS EL DEBER CÍVICO INELUDIBLE DE VOTAR

EDUCACIÓN PARA LA VIDA EN FAMILIA

Hoy más que nunca debemos trabajar para rescatar el poco de familia que nos queda. No podemos seguir siendo indiferentes o atenidos a lo que el destino disponga. Nosotros somos los arquitectos de nuestro propio destino y debemos lograr el mejor de los destinos para nosotros y nuestra familia. Despertemos para hacer respetar nuestros derechos fundamentales, entre otros a la vida, a la educación, al trabajo, a la salud, a la propiedad.

RECORDEMOS UN DEBER CÍVICO INELUDIBLE

El Art. 40 de la Constitución dispone que todo colombiano tiene el derecho a participar en la conformación del poder político y para hacer efectivo ese derecho puede elegir y ser elegido tomando parte en las elecciones.

El Art. 95 de la Constitución ordena que los colombianos y los habitantes de Colombia en general, debemos participar en la vida política, cívica y comunitaria del País y propender al logro y mantenimiento de la paz, que es un derecho y un deber para todos los habitantes de Colombia.

El próximo 11 de marzo elegiremos nuevo Congreso. Nunca antes como en este proceso electoral tenemos el deber ineludible de votar. Hay una gama importante de opciones y candidatos. Personalmente creo que hay que descartar toda fórmula populista con promesas de ríos de leche, miel y pan o de hacer una nueva Colombia desconociendo los principios básicos de la democracia o de cambiar la columna vertebral de nuestras instituciones. Entre las demás opciones debemos escoger las más confiables. Las que por lo menos de manera honrada se comprometan a garantizar los derechos fundamentales de la familia y la sociedad. Seguro que las encontraremos.

La propuesta es que el voto en blanco y la abstención no superen el 9% del total de las personas que tenemos derecho al voto. Somos cerca de 35.000.000 y debemos lograr por lo menos 32.000.000 de votos.

Invito a que todos nos comprometamos en esta gran campaña en pro de que tengamos una Colombia viable con opción de lograr en dos o tres generaciones una reducción importante de la pobreza y de comportamientos corruptos.

SIGAMOS CULTIVANDO LA PAZ EN NUESTRAS FAMILIAS

Sigamos cultivando el respeto, las palabras decentes y amables, el buen trato, la mejor cultura, el decoro, la autoestima, el civismo, el ser mejor cada día en nuestras familias, en nuestra sociedad y en Colombia para tener personas que puedan solucionar con prudencia sus conflictos y por sobre todo con la garantía de que tendrán asegurado su futuro en sana convivencia.

Abog. Carlos Fradique-Méndez
@carlosfradique
www.ElCompaz.com