EDUCACIÒN PARA LA VIDA EN FAMILIA
Seamos iguales en lo bueno.
Esta es la lección 612 y el tema es LA IGUALDAD NO PUEDE NEGAR LAS DIFERENCIAS.
Este mes de marzo se celebran a nivel mundial, 31 días en pro de la garantía de la igualdad de la mujer frente al hombre. Mujer y hombre no pueden ser rivales, deben ser complementarios
Excelente oportunidad para aclarar cómo debe entenderse la igualdad, que muchos llaman equidad de género, igualdad entre hombres y mujeres, dado que las mujeres en muchos campos de la vida diaria, frente a condiciones iguales a las de los hombres, tienen trato diferente por el salario, por el dominio empresarial, por reconocimientos de méritos y garantías de ascenso.
Las siguientes frases ayudan a entender las condiciones de discriminación. “Todos somos iguales, pero hay unos que son más iguales que otros” “Todos somos iguales y para hacernos iguales, no es necesario respetar las diferencias” Estas frases ofenden y violan los derechos a la igualdad y a la dignidad humana. La verdadera igual se logra respetando las diferencias y garantizando para todos los mínimos de una vida digna.
La celebración de marzo es para que entendamos la igualdad, respetando las diferencias, entre hombres y mujeres, pero es válido afirmar que también se debe garantizar la igualdad de hombres entre si y mujeres entre sí.
Y debemos entender que la igualdad en términos absolutos es un imposible por naturaleza. Todos tenemos ADN diferente, todos somos seres únicos e irrepetibles, todos queremos ser diferentes a los demás. Las personas se comparan con sus semejantes y siempre encuentran que ellas tienen una mejor condición que las personas con las que se comparan. Y quieren tener mejor condición, quieren estar en los podios, quieren tener mejores ascensos y miles condiciones más que nos hacen diferentes.
Hagamos énfasis en que la igualdad debe ser en lo bueno y no en lo malo. No iguales por el lenguaje vulgar, por la chabacanería, por el vicio del licor o de la droga, por la ofensa a la estima, por ser proclives al delito y muchas más opciones,
Lo que no puede aceptarse es que en el común de las personas haya diferencias gigantes en lo esencial y que haya personas que carecen de las condiciones mínimas para tener una vida digna, educación de calidad, salario justo, atención de calidad en educación, salud, servicios públicos, seguridad, respeto a la vida y a la propiedad.
Luchemos todos, hombres y mujeres para tener garantizadas las condiciones mínimas para una vida digna y que de ese piso hacia arriba todos tengamos las oportunidades de ser hoy mejores que ayer y mañana mejores que hoy.
Su amigo, abogado y profesor Carlos Fradique-Méndez